Why Mintha... -footer- -f1-

Mintha nació de una inquietud personal, una inquietud que viene de hace mucho tiempo.

Crear me viene de familia, dos padres arquitectos y pintores, creadores de obras magníficas que visten ahora mi casa. No podía ser de otra forma, tenía que encontrar mi forma de expresión creativa.

He tardado pero creo que aquí está, en Mintha, me encantan los accesorios, me encantan los cojines, me encantan los toques alegres y me encanta preparar fiestas (la última sección mintha).

¿Y por qué te has animado a darle forma comercial a tus creaciones y hacer de ello tu medio de vida? ¿Por qué no?

Ya lo comenté en más de una ocasión en otros lugares: cuando cumplí 18 años mi padre me regaló un libro: "Poemas", de R. Kipling, con el prólogo de T.S. Ellitot y traducción de Luis Cremades. Ed. Visor. Madrid. 1993.

En la página 121 escribió: "Este poema ha marcado gran parte de mi vida. Siempre lo he tenido como meta, aunque pocas veces conseguido. [...]"

                                             Si
 
              Si puedes mantener la cabeza cuando todo a tu alrededor
              pierde la suya y por ello te culpan,
              si puedes confiar en ti cuando de ti todos dudan,
              pero admites también sus dudas;
              si puedes esperar sin cansarte en la espera,
              o ser mentido, no pagues con mentiras,
              o ser odiado, no des lugar al odio,
              y -aun- no parezcas demasiado bueno, ni demasiado sabio.

              Si puedes soñar -y no hacer de los sueños tu maestro,
              si puedes pensar -y no hacer de las ideas tu objetivo,
              si puedes encontrarte con el Triunfo y el Desastre
              y tratar de la misma manera a los dos farsantes;
              si puedes admitir la verdad que has dicho
              engañado por bribones que hacen trampas para tontos.
              O mirar las cosas que en tu vida has puesto, rotas,
              y agacharte y reconstruirlas con herramientas viejas.

              Si puedes arrinconar todas tus victorias
              y arriesgarlas por un golpe de suerte,
              y perder, y empezar de nuevo desde el principio
              y nunca decir nada de lo que has perdido;
              si puedes forzar tu corazón y nervios y tendones
              para jugar tu turno tiempo después de que se hayan gastado.
              Y así resistir cuando no te quede nada
              excepto la Voluntad que les dice: «Resistid».
 
              Si puedes hablar con multitudes y mantener tu virtud,
              o pasear con reyes y no perder el sentido común,
              si los enemigos y los amigos no pueden herirte,
              si todos cuentan contigo, pero ninguno demasiado;
              si puedes llenar el minuto inolvidable
              con los sesenta segundos que lo recorren.
              Tuya es la Tierra y todo lo que en ella habita,
              y -lo que es más-, serás Hombre, hijo.

Desde entonces marca también mi vida, fundamentalmente "si puedes llenar el minuto inolvidable
con los sesenta segundos que lo recorren
".

He de decir que es complicado, asusta, pero merece la pena.

Cuando falleció encontramos varias versiones-traducciones de este poema entre los papeles de su mesa de trabajo en su despacho.
 
Días antes de casarme, caminando un día por la ciudad encontré este cuadro con uno de sus párrafos:



Al día siguiente me lo trajo quien es mi compañero en la vida, como regalo de Boda. Ahora preside mi salón, así que definitivamente es una referencia en mi vida.
 
Y es que no me resisto a intentar llenar el minuto inolvidable con los sesenta segundos que lo recorren.

Con Mintha espero poder ayudarte a disfrutar de la vida, a llenar tus momentos de color y alegria.

A que tu diva tenga ese toque picante, fresco y lleno de color que hace que todo el resto merezca la pena.

Bienvenido a la inspiración hecha realidad.

Bienvenido a .